The Island of Dr. Brain Desarrolladora: Sierra Online Año: 1992 Género: Ingenio, Educativo Plataforma: MS-DOS (lanzado en floppy y CD-ROM) Testeado con SCUMMVM (engine SCI) Argumento: El Dr. Thaddeus Egghead Brain debe recuperar sus planes secretos de su más reciente proyecto que han sido robados, y para lograrlo, necesita de tu ayuda para encontrar una batería especial que se conserva en su isla personal. Deberás atravesar la barrera de interminables rompecabezas que el Dr. Brain ha dispuesto como dispositivo de seguridad para conseguir la batería, y regresar sano y salvo. El juego: The Island of Dr. Brain (la secuela de "Castle of Dr. Brain", del año anterior) es, puesto de forma muy sencilla, un compendio de juegos de ingenio, rompecabezas, y enigmas de todo tipo puestos en fila para entretener al videojugador de principios de los 90, cuando todavía los desarrolladores se permitían innovar y tomar riesgos, con resultados dispares. Si bien el juego se ofrece como una "aventura", no hay tal cosa. Si bien se plantea una línea argumental y ocasionales descripciones del entorno y objetos, no existe para el jugador otra opción que la resolución de las diferentes pruebas, de forma lineal e invariable. Los desafíos con los que debemos lidiar incluyen juegos matemáticos, verdaderos rompecabezas, juegos de ingenio clásicos, sopas de letras (!), y otros inclasificables. Apartado técnico: Es evidente desde el comienzo mismo del juego la intención de los creadores de aprovechar el abanico completo de recursos de los sistemas del momento. Mucho color, detalles en objetos, fondos, y texturas, animaciones pequeñas para mostrar la "vida" del entorno, etc. Los gráficos son cuidados y de tono informal, a veces poco acorde con el tono no necesariamente gracioso de los puzzles. Hay un rompecabezas animado (a mí entender, un punto alto en lo técnico) que es verdaderamente admirable. La música está muy cuidada y va cambiando de acuerdo al escenario o desafío en el que estamos ubicados, variedad que se agradece, pero las melodías son bastante cortas y la repetición excesiva de las mismas cuando debemos enfrentar pruebas extensas puede ocasionar que nuestra cabeza literalmente se fría. Intercalados con los textos en pantalla hay eventuales mensajes de voz del Dr. Brain que ayudan un poco a romper la soledad del entorno. Los controles son sencillos, a pesar de que no existen indicaciones acerca de los mismos (no hay mucho que hacer, realmente) ni de las funciones de la barra superior. La experiencia: Si tu estilo son los juegos de ingenio, entonces no hay mucho que decir, simplemente tienes que darle unas horas a uno de los representantes más respetados de la vieja escuela en el género. Ahora, si, como yo, simplemente eres un jugador con gustos variados que disfruta de distintos tipos de juegos, entonces quizá puedas apuntar para otro lado, si bien siempre es agradable visitar los juegos clásicos. Veamos por qué. En lo que refiere a lo conceptual, el juego es un auténtico pastiche. Sin spoilear dentro del juego, la isla de Brain, un supuesto paraíso tropical, comienza en un pasaje rocoso que cuenta con un sarcófago egipcio (con un escalofriante esqueleto móvil) y un microscopio de última tecnología con células de colores, lo uno al lado de lo otro. Esto debiera dar una idea de la mezcolanza que encontraremos a lo largo del juego. Los enigmas con los que nos iremos cruzando tampoco siguen una idea central y a veces ni siquiera se explican sus motivos ni su relación con la historia o el escenario. En fin, un cambalache. El juego permite escoger el nivel de dificultad, lo cual es una buena decisión en lo que se refiere al rango de edades que podría acceder a jugar. Sin embargo, lo disputé en modo Experto y no tuve mayores contratiempos para avanzar. Que algunos desafíos no fueran particularmente difíciles no implica que los mismos pudieran ser rápidamente superados, y aquí viene una falla bastante irritante. Otra vez, sin spoilear, uno de los primeros puzzles se trata del conocido juego "La Torre de Hanoi", con 7 piezas. Incluso sabiendo cómo resolverlo, me tomó cerca de una hora poder completarlo, debido a la lentitud con la que se realizan los movimientos de las fichas. Lo peor del asunto, es que no podemos guardar la partida durante el desarrollo del puzzle con lo cual debemos superarlo en una sola tirada... o empezar de nuevo. Lo mismo vale por ejemplo para el interesante rompecabezas animado anteriormente citado, el cual me llevó unos 45 minutos y me costó unos buenos calambres. Otros desafíos son más rápidos pero no siempre fáciles de interpretar (hubo uno matemático que resolví sin realmente entender su lógica). Otro aspecto negativo es que cada enigma debe ser resuelto en un orden lineal, es decir, no podemos dedicarnos a ningún otro hasta resolver aquel en el que estamos enfrascados. Conclusión: El juego me ha dejado un sabor agridulce. Quisiera poder considerarlo junto con otros juegos de su especie como Carmen San Diego, u otros más modernos como The 7th Guest, pero no puedo. Si bien admiro lo que intentaron hacer los creadores, incluyendo distintos entretenimientos y una dosis de humor absurdo, sus fallas en lo que a jugabilidad se refiere lo quitan de la lista de juegos que podría recomendar para jugar al pasar. Aunque, de nuevo, aquellos que disfrutan de los desafíos de ingenio, pasarán un buen rato delante de la pantalla antes de aburrirse.
Hey yo tenía este! le lancé el disco a mi perro cuando se puso impertinente, y creo que luego lo usé para cortar una pizza de jalapeño. Buena reseña Ojón. Posta me gustó.
Buena review Hacha. Está disponible en español? porque justo puzzles con juegos de palabras traducidos sería todo un logro por parte de Sierra.
Gracias! No sé si hay traducción al español. Al menos en la sopa de letras que tuve que enfrentar, podías elegir hacerla en español. Pero para los juegos de palabras lo dudo...