Plataforma: PC Género: Carreras Año: 1999 Desarrolladora(s): Sunspire Studios Textos: Inglés Creo que es un error común que la gente -me incluyo- no se anime a mirar mas allá de la «bolsa» de Microsoft a la hora de elegir que jugar. Porque si bien es cierto que la mayoría de los clásicos mas imperdibles se han creado para sus sistemas, no todos ellos lo han hecho, y solo basta con mirar juegos como Marathon en Mac OS, Gloom en Amiga, Wolfenstein 2004 en Spectrum o Glest en Linux para comprobarlo. Mas aún, hoy en día el asunto de virtualizar se ha vuelto mucho mas sencillo, algo trivial si se quiere. E incluso hay gente dedicándose a portear voluntariamente sus juegos favoritos para que, por ejemplo, un windowsero pueda jugar Gloom o un linuxero deleitarse con Marathon. Francamente el probar o no estos programas es mas una cuestión de querer que de poder. El juego que nos ocupa ahora, Tux Racer, fue concebido por Jasmin Patry y su equipo (autodenominado Sunspire Studios) en algún momento de 1999, y publicado bajo licencia GNU mas tarde ese año. Como probablemente el nombre lo sugiera, se trata de un árcade de carreras protagonizado por el pingüinito Tux, mascota oficial del sistema operativo de código abierto Linux. Y aunque es hablar común decir que los juegos personales solo deben de satisfacer a sus creadores, lo cierto es que a este el éxito lo ha alcanzado, llegando en 2001 al millón de descargas. No es para menos, ya que se trata de -dentro de lo que cabe- un trabajo muy competente. Para empezar toca decir que el juego utiliza un motor gráfico muy similar al del Sonic R de SEGA... y de hecho, mientras escribo estas lineas me es imposible no compararlos. Mas aún, el juego de Sunspire utiliza una versión mas pulida pero menos espectacular que la acuñada por la desarrolladora nipona. Ya que a grandes rasgos en el universo de Tux el sol ilumina el terreno de manera uniforme, casi ningún objeto es capaz de desprender sombra y hay muy pocas irregularidades o fallas geográficas. Esto no le impide, claro, utilizar diferentes tipos de suelos, que provocan diferentes reacciones a su vez, ser afectado por el viento o proyectar niebla. La forma en que está creado le da al juego una flexibilidad de la que no parece en un principio capaz. Por ejemplo, la mayoría de los mapas se parecen, tiene un desarrollo poco enrevesado y bastante lineal, pero se les saca partido a estos al permitirle al jugador elegir si quiere jugarlos con viento, niebla, o de noche. Los escenarios nocturnos son particularmente hermosos, y el punto culminante del diseño artístico del juego... pero son mas que eso, ya que jugar una carrera bajo la luna es totalmente diferente a hacerlo con luz solar, incrementando exponencialmente su dificultad. Además -como ya he mencionado- hay diseminados por la pista unos pocos tramos de roca e hielo que pueden causar la perdida de dirección y velocidad de Tux. También existen algunas elevaciones menores que pueden impulsarlo hacia adelante y unos cuantos obstáculos que hay que evadir. Y ya en el aspecto misceláneo podemos vislumbrar lagos congelados y piedras semi-enterradas en la nieve; estas no afectan a nuestro emplumado amigo, pero si que suman a la ambientación. Para rematarla, tengo que señalar que el juego cuenta con unos bellos fondos renderizados. En lo que hace al aparato sonoro, debo decir que los chicos de Sunspire trabajaron poco, únicamente para llenar el expediente. Compusieron solo un par de temas (de hecho solo son dos, uno para los menúes y el otro para las carreras) y por alguna razón estos parecen buscar el efecto contrario al que deberían tener. Porque un juego de carreras (cualquiera en realidad) puede ganar mucho con una buena selección musical, pero aquí no solo hay una sola tonada diseñada para tal fin, sino que además esta transcurre en un extraño tono relajante que parece calmar al jugador mucho mas que incentivarlo. Al menos a mi esta insustancialidad no dejó de parecerme chocante, ya que unos buenos temas movidos (como los del Road Rash 3) pueden hacer maravillas por las competiciones. Solo para dejarlo en claro, a mi los temas del Tux Racer no me disgustan, solo que me saben un poco extraños. En fin, una lastima pero allá ellos. Los efectos de sonido son mas de lo mismo, y la verdad que yo no lo entiendo, es como si los diseñadores hubieran apagado los motores en plena marcha. Es probable que esta fuera la última parte que crearon y estuvieran dispuestos a mejorarla en sucesivas actualizaciones, pero tal y como están ahora (tras doce años desde el último release) son totalmente irrelevantes. La parte mas importante del juego (su acción y todo lo que la rodea) cumple con creces. El programa se maneja como un clásico árcade del género, pero además incorpora discretamente características propias de los fichines y sus derivados. Ahora me explayaré sobre ello. Nuestra única preocupación a lo largo del juego es llevar a Tux desde el punto de partida hacia la meta, pero debemos hacerlo siguiendo unas normativas especiales. La mas común de ellas es hacerlo dentro del tiempo estipulado, pero también pueden influir en nuestro resultado la cantidad de arenques que recolectemos, o incluso el puntaje alcanzado durante la vuelta. No es raro fallar una carrera por uno o dos segundos, por la falta de un solo pescado en nuestro contador, o por un par de puntos perdidos; pero por algún motivo -que no he llegado a descifrar-, es aquí mismo donde reside el mayor atractivo del juego. Lo que lo hace adictivo -quizá seamos todos muy masoquistas... o el juego esté muy bueno; debe ser la segunda-. La idea que tenían los diseñadores era incluir toda una serie de copas (divididas en carreras) que el jugador pudiera ir desbloqueando a medida que las superaba. Desgraciadamente eso no se hizo realidad, ya que el desarrollo parece haberse detenido en algún momento del 2001, y solo está disponible para jugar la primera de estas series... AUNQUE, gracias a que se trata de un trabajo de código abierto, han ido apareciendo packs de circuitos programados por los fanáticos para suplir esto, otorgándole alguna variedad. (Imágenes promocionales oficiales) En conclusión: Tux Racer es un buen juego que de haberse completado hubiera marcado un antes y un después en los árcades de carreras... es mas, me animo a decir que muchos lo hubieran considerado imprescindible (ya que comenzaba a mostrar detalles de pura genialidad). Es una lastima que quedase a medio desarrollo... pero hey, tal y como está es todo un logro. Detalles de ejecución: Ninguno Cuevinos que lo han terminado: Ciclón de Hojas Extras/Multimedia: Pagina Oficial Gameplay http://tuxracer.sourceforge.net/download.html#Linux Fuente: IceDragonNET
¡Gracias por la publicidad del post de Sonic! Sé que no soy el único que piensa en los pingüinos del Super Mario 64